Spiderman No Way Home. Fan Service en acción... ¿será un verdadero punto de inflexión?

Llega tarde, pero llega. Después de una acumulación de trabajo salvajae, Freakdemonium va a intentar poner en orden todas las publicaciones pendientes empezando por esta: Spiderman No Way Home. O, dicho de otra manera: la gran esperanza de que se produzca un cambio de tendencia positivo hacia el fan service.

Porque si algo tiene esta película por encima de todo es que es un guiño constante a los fans de todas las sagas. Prácticamente basa su atractivo en el trabajo hecho por Sony con Tobey Macguire y Andrew Garfield. Todo lo demás se convierte en aceptable solo por la sola presencia de esos héroes y sus villanos.

Vamos a quitarnos la espinita de buenas a primeras: ¿Pudo Dr Strange hacer olvidar a todo el mundo que Mysterio existía? Parece ser que sí, pero ¿acaso no queríais ver la película con tres Spidermans y ese momento tan trágico al final? Lo dicho, por ver a los tres y sus villanos yo acepto que el Hechicero Supremo sea un poco chapuzas y que aquí nadie dedique tiempo a la reflexión.

A por faena. Una vez liada con el hechizo que debía salvar la vida “normal” de Peter, empieza la verdadera película, y es que estamos hablando de ver, uno a uno, al Dr Octopus (grandísimo Alfred Molina), a Electro, al hombre de arena, al Lagarto y al Duende Verde (todavía más grande Willem Dafoe). Y luego, llega ese gran momento. Los Spiderman’s se encuentran. Atrás queda que Peter Parker humillara al protector multidimensional y primer hechicero de la tierra en la dimensión espejo, porque Andrew, Tobey y Tom están juntos y dispuestos a dar soluciones. Y así es como traman un plan para solucionar la papeleta sin matar a nadie. No destripo más, aunque a estas alturas seguro que la habéis visto.

Fan service por doquier. Cosas que recuerdo: ¡¡¡La aparición de Matt Murdock interpretado por Charlie Cox!!! Los spiderman’s señalándose como en el meme y su abrazo, Tom Hardy como Venom (en un enrevesado giro que o se pasa por el forro el argumento, o nos lo tienen que explicar muy bien), las apariciones difuminadas de gata negra, Sergei Kravinoff, Escorpión o el Rhino. Ned Leeds con habilidades naturales para la magia (¿nos quieren decir algo? ¿Habrá Hobgoblin? ¿Se habrá visto afectado de forma diferente por el hechizo y se volverá loco?), el “Creí que eras negro” de Jaimie Foxx que hace pensar en un posible desembarco de Miles Morales… Seguro que hubo algo más.

Como veis, una constante. A día de hoy, este sencillo (porque era muy fácil y estaba escrito) truco ha reportado a las compañías la friolera de 1740 millones de euros y va a la caza de Avengers Infinity War (que lleva muchos más años sacando rendimiento). Nada que ver con los 400 modestos millones del raspado de olla de Shang Chi o Viuda Negra y habiendo dejado atrás a Capitana Marvel (también con más tiempo en pantalla), que por de pronto ya se ha caído de su propia secuela en el título.

Lo que decía, ¿será un punto de inflexión?