Clásico donde los haya, este libro es heredero de una tradición de historias de terror y vampiros anterior. Sin embargo, con el tiempo, el personaje del Conde Drácula se ha confundido totalmente con las definiciones originales y los cánones de las criaturas vampíricas que se conocían hasta entonces. Hoy en día, no hay persona en el mundo que piense en el término vampirismo y no tenga a Drácula en mente (especialmente desde que a finales del siglo XX se adaptara la novela en una exitosa película). Tal ha sido el éxito de esta novela a lo largo de más de un siglo, tiempo en el que jamás ha dejado de estar en circulación.

Quizás influyó la experiencia personal del propio autor, que pasó siete años enfermo encerrado en su casa y las historias que su madre le contaba, para que esta obra se convirtiera en una de las novelas de terror mejor escritas de todos los tiempos. Stoker, que la escribió en forma epistolar, se documentó durante mucho tiempo sobre los mitos de la Europa Oriental y, es bien sabido, que son muy importantes en su novela los mitos que circulaban alrededor de Vlad ‘El Empalador’, histórico príncipe de Valaquia, y Erzébét Báthory, condesa húngara, de la que se decía que bebía y se bañaba en sangre de doncellas.

La trama en sí se centra en la propia apertura del Conde hacia el nuevo mundo industrial que ha llegado a las puertas de sus tierras. En su plan para abandonar su aislamiento e introducirse en una sociedad con abundante cantidad de personas para proseguir con sus actos de depredación, involucrará al recientemente titulado Jonathan Harker y a su prometida Mina Murray. En esta primera fase, la intención del Conde será aprender de Jonathan todo lo necesario para pasar desapercibido en su territorio objetivo, Londres, la capital del mundo en aquella época. La segunda parte del libro nos narra la llegada del Conde a tierras inglesas y todo lo que allí obra. Casualmente, uno de sus objetivos será Lucy Westenra, amiga íntima de Mina Murray, lo que terminará implicando al resto de los personajes y al Doctor Van Helsing en una persecución sin descanso por todos los refugios del Conde hasta conseguir expulsarlo de Inglaterra. La tercera parte de libro nos lleva a la conclusión final, y en ella todo el grupo se mueve con la mayor presteza para darle caza al Conde antes de que pueda regresar a su Castillo original.

Sobre los personajes, está claro que Mina Murray es quizás la más importante después del propio Conde. Dentro de los ideales de la época, Mina se presenta como una mujer con aptitudes y costumbre más propias de su futuro cercano. Es interesante ver como ciertas ideas sobre el papel de la mujer en la sociedad ya flotaban en las mentes desde mediados del siglo XIX y fueron recogidas en este libro.

Libro muy recomendado. Un ‘Debe’ para toda biblioteca que se precie.